MARIONETA.
¿Hacer una marioneta?. La primera impresión que me produjo es la de una
actividad un tanto simple y sin ningún sentido; en apariencia, algo que no iba a constituir ningún tipo de dificultad para un estudiante
universitario. Sin embargo, debo reconocer que resultó ser todo lo contrario.
El solo hecho de pensar en qué lugar se podría conseguir o comprar lo necesario
para hacer una marioneta, se convirtió en un acto tedioso, demorado y hasta
aburrido, precisamente por ser tan simple en apariencia, pero tan complejo en
realidad, y eso que solo se trataba de los elementos para hacerla.
Tiempo después, luego de pensar, divagar, preguntar y perder el tiempo decidí
dejar de cuestionarlo y opte por comenzar. Primero debía escoger la identidad
que iba a tener la marioneta, por tanto, le quite la cabeza a un juguete de mi
sobrino, claro está que cuando lo hice inmediatamente considere que la
marioneta que resultaría de todo esto, se la daría a él. La cabeza seleccionada
fue la de spider-man, y aunque hace mucho tiempo que mi sobrino no jugaba con
aquel juguete, el degollamiento se hizo con la mayor discreción posible. Al
menos ya estaba la cabeza, solo faltaba el resto!
Para la fabricación de la vestimenta decidí pedirle ayuda a mi mamá, sabe
coser, por esta razón, era la mejor opción para que me colaborara en semejante labor.
Como lo más lógica era que el traje fuera en relación con el personaje, conseguí
trozos de tela de color rojo y azul para la creación del traje. Aún faltaban
muchas cosas: la madera que iba llevar dentro del traje para darle una
estructura más rígida y más acorde a la esencia de una marioneta, las manos,
los pies, el nailon, las tachuelas y puntillas
para armar la estructura con que
se iba a manejar la marioneta.
Las manos y los pies los conseguí en una papelería donde vendían infinidad
de cosas para hacer no solo marionetas, puesto que también había un sinnúmero de
objetos para la creación de títeres,
peluches, cuadros, afiches y muchas cosas más. Como es de suponer, en este
lugar tan bien abastecido, conseguí la madera, la espuma que colocaría en el
pecho de la marioneta y el nailon. Las tachuelas, el pegante y el martillo los
tome de un pequeño cuarto que se halla en la parte trasera de mi casa, donde se
encuentra una gran colección de herramientas de mi padre.
Para iniciar la construcción, mi madre creo la camisa y el pantalón de la
marioneta, después de esto me dispuse a introducir la espuma que iría en el
pecho para posteriormente unir la camisa al pantalón. Luego, pegue la cabeza a
la ropa, colocando pegante tanto en la cabeza como en la parte interior del
cuello de la camisa. Después, corte los trozos de madera que colocaría en los
brazos y piernas para recrear una forma más
similar a una marioneta.
Habiendo introducido dichos trozos de madera, pegue los pies y manos de
forma similar a como lo había hecho con la cabeza. Después, me dispuse a hacer
la base de madera, de la cual penderían la hebras de nailon que sujetarían y darían
movimiento a la marioneta; con los trozos de madera y unas puntillas pequeñas construí
la base en forma de H. Finalmente coloqué una hebra de nailon en cada una de las extremidades utilizando una
aguja para luego unir el otro extremo del nailon a cada una de las puntas de la
H que había creado.
Tal vez el hecho de haber condensado todo el proceso en una página produzca
la ilusión de que la creación de la marioneta fue algo muy sencillo, pero como
bien se dice por ahí; una cosa es decirlo y otra muy distinta es hacerlo. Muy probablemente
sin la ayuda de mi mamá y de una de mis hermanas, no habría presentado la
marioneta o la habría comprado como pensó el profesor, pero la verdad es que de
haber encontrado un lugar donde comprarla lo habría hecho, pero después de preguntar
y de ir a cada lugar donde me decían, no conseguí quien me vendiera una.
Tal vez lo mejor de todo esto fue no haber encontrado
un lugar para comprar la marioneta ya hecha. como lo mencione al principio de
mi relato, desde el instante en que comencé a pensar en donde conseguir las
cosas para hacer la marioneta, comprendí que no era algo sencillo o sin ningún tipo
de valor. En verdad, se requiere de análisis, investigación y dedicación para
la creación de un objeto que en esencia es un elemento destinado al juego y la diversión
pero que se construcción implica una serie de aspectos que vale la pena experimentar.
